Reparaciones ferroviarias

Estabilización y relleno de cavidades en el lecho de la vía

En aras de la sostenibilidad y, por supuesto, para ahorrar costes, a veces es mejor reparar que sustituir, como en el caso del ferrocarril canadiense en otoño de 2024.
Allí, las vías del metro estaban dañadas en dos puntos. Con la ayuda de un material de inyección de PU 2K especialmente desarrollado para esta aplicación en una proporción de mezcla de 1:1, se estabilizaron el balasto y la tierra bajo las vías y se rellenaron las cavidades. Nuestra filial estadounidense WIWA LLC supervisó el proyecto in situ con una WIWA INJECT 2K 333 GX, que bombeó 27,5 litros por minuto a unas 25 carreras dobles por minuto y con una relación de presión de 18:1. En tres horas, había bombeado la impresionante cantidad de 1200 litros de material. En total, la inyección se llevó a cabo a lo largo de casi nueve metros, utilizando los packers a menos de un metro de distancia (y hasta tres metros de profundidad en el suelo).
El equipo trabajó en dos noches consecutivas, cada vez de 1 a 4 de la madrugada, porque los trenes locales tenían que volver a funcionar a partir de las 5. Y todo salió a pedir de boca.
El hecho de que no hubiera que sustituir por completo el lecho de la vía significó que pudieron evitarse trastornos ferroviarios masivos y costes considerables.